¡Únete a la lucha contra el despilfarro de alimentos!
Se estima que, en la Unión Europea, un 20 % de los alimentos producidos se pierden o desperdician. Hablamos de 89 millones de toneladas de alimentos, lo que equivale a 179 kilos por habitante. Los costes asociados a este fenómeno serían de 143 millones de euros en la UE.
La producción de alimentos consume gran cantidad de energía y de recursos, cada vez más escasos, como el agua o la tierra cultivable. Según datos de la FAO, la huella hídrica de la comida se lleva el 70% del agua que se gasta a nivel mundial. Además, la producción de alimentos genera el 17% de las emisiones directas de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y entre el 20 y el 30% de los impactos ambientales totales.
¿Qué es el despilfarro de alimentos?
Es el conjunto de productos alimenticios descartados de la cadena agroalimentaria pero que siguen siendo perfectamente comestibles y adecuados para el consumo humano y que, a falta de posibles usos alternativos, terminan eliminados como residuos.
